14 diciembre, 2015

Comienzo este nuevo post del blog con la cantilena de fondo en la radio del debate a dos entre el actual Presidente del Gobierno y el aspirante del PSOE, yo estoy terminando mi lunes, otro más del calendario con sus altos y bajos mientras ellos debaten sobre el futuro, sus propuestas y deseos para una nueva legislatura; desean alcanzar nuestro favor para seguir gobernando o alcanzar el poder para hacerlo, no sé en que momento hablaran de Educación, creo que está todo más o menos pactado, tiempos, momentos, temas, etc. de manera previa al comienzo, así que tarde o temprano el tema saldrá.


De manera paralela otros candidatos debatiran en otra cadena de televisión, y supongo que hablen de sus intereses, posiblemente la Educación salga a relucir … tanto los primeros como los segundos a los que me refiero, imagino que todos los tenéis ya en mente, harán sus propuestas de partido a partir de se programa electoral, desde los supuestos ideológicos que desean desarrollar; tendrán su idea sobre la Educación y me temo que en la mayoria de los casos no coincide con la realidad que vivimos la mayoría de nosotros en el día a día de la escuela, y es que mis niños, esos canijos de tres años no saben nada de lo que pasa a su alrededor, afortunadamente me atrevo a añadir, pues si a los adultos nos cuesta seguir el ritmo para ellos sería imposible.

Confieso mi creciente desinterés por estos temas, con los años te vas dando cuenta de la inutilidad de estar demasiado atento y llevarte malos ratos por promesas e ideas que no llegan a realizarse, parece que en Educación todo es relativo y modificable cada cuatro años. Pronto tendremos un nuevo gobierno que nos dirá cómo va a arreglar los problemas de la Educación. Tendremos otro ministro que seguramente, vista la experiencia que el tiempo nos da, no habrá pisado una escuela desde su infancia, lo más cerca será una cátedra universitaria de una materia que estará lejos de la realidad de nuestras aulas, sí, esas de Infantil o Primaria llenas de niños acatarrados ahora que comienza el invierno, y es que no es lo mismo andar a diario por despachos que por aulas y patios.

¿Es posible conocer la realidad a fondo desde una responsabilidad tan alta como un ministerio? Pues tiene que ser terriblemente complicado, estoy seguro de ello, es obvio que no se puede estar en todos los sitios, ni conocer de primera mano la realidad de cada luger, pero tampoco ayudan las típicas visitas a los centros escolares que se suelen hacer desde la administración, paseo, saludo a niños, foto oficial y hasta otro día, es complicado así acercarse a la realidad, ni tan siquiera rozarla, sin sentarnos a una misma mesa e intercambiar pareceres es muy complicado.

Todas las administraciones tienen equipos, expertos … gentes que están más cerca de la realidad pero ¿les hacen caso? ¿Realmente su opinión cuenta? ¿Y las familias realmente cuentan en el proceso educativo si lo situamos en términos legislativos y de gestión real? Siendo realista, quizás algo pesimista, diría que no a todo, el programa electoral o los deseos que nacen de la estructura de partido imponen su realidad, introducen los cambios y nos hacen asumirlos a los que estamos por debajo, es lo que hay, aunque el verdadero impacto se va diluyendo a medida que se aleja de la fuente de origen.

Todo cambio de arriba hacia abajo … fracasa irremediablemente. Si en la relación padres e hijos, maestros y alumnos imposible que una parte condicione a la otra su comportamiento y aprendizaje de manera absoluta, en un colectivo mayor es infimitamente más complicado. Cada uno en nuestra escuela y ámbito hacemos lo que podemos, lo que pensamos que es mejor y más positivo pero sin duda es insuficiente sino creamos red y hacemos oír nuestra voz.

Hay muchos temas en campaña electoral importantes, la EDUCACIÓN, el futuro de nuestra sociedad como colectivo debería ser el primer tema, el eje sobre el que desarrollar el resto de los debates y temas ¿Qué sociedad queremos? Es una pregunta que no se puede responder a cuatro años vista, es imposible, debe plantearse en términos de generación, con una visión global y amplia que oriente la acción hacia los que nos sucederan, introdución los matices y consideraciones desde la perspectiva de cada uno.

Llegarán nuevas reformas, nuevas leyes y decretos pero mañana cuando vuelva a decir buenos días a mis niños no estaré pensando en eso, estaré ocupado en saber cómo les ha ido el día anterior; cómo se sienten hoy, etc., etc. Estaremos ocupados, en definitiva, en seguir creciendo un poquito más … y el viernes dejaremos la clase bien colocada para que todo el mundo pueda usarla el domingo cuando vengan a votar a nuestra clase; ya veremos si la decisión que tomemos entre todos nos ayuda o no a continuar construyendo su futuro, ojala que sí, que lleguen los acuerdos, que llegue la tan ansiada estabilidad a nuestra Educación y, que los que estamos abajo, donde la sociedad comienza, tengamos por fin un poquito más de voz allá arriba donde se toman las decisiones. Sin niños, familias y maestros/as no hay futuro posible, somos nosotros los que mantenemos la maquinaria en marcha, con nuestro esfuerzo y dedicación diarios.

Feliz semana y a participar en construir una sociedad mejor para todos 😉